“Hablar de racismo está de moda” porque ya hay muchas personas negras y afrodescendientes que tienen conciencia racial.
“Hablar de racismo está de moda” porque vivimos el cisheteropatriarcado racista homotransfóbico.
“Hablar de racismo está de moda” porque la hegemonía blanca oprime a todo lo que no pertenezca a la blanquitud.
“Hablar de racismo está de moda” porque la sociedad se sigue organizando según la identidad racial, la identidad de género, el género, la clase, y otras condiciones de los seres humanos.
“Hablar de racismo está de moda” porque las redes sociales han multiplicado el acceso a y la creación de plataformas, medios de prensa, blogs y otras iniciativas digitales gestionadas y dirigidas por personas afrodescendientes.
“Hablar de racismo está de moda” porque nuestros ancestros y ancestras nos legaron varias guerras de independencias, partidos políticos, cimarronaje, espiritualidad y otras experiencias de resistencia.
“Hablar de racismo está de moda” porque muchas personas negras y afrodescendientes están asumiendo su negritud, sacando a su abuela de la cocina, llevando sus coronas afros.
“Hablar de racismo está de moda” porque ya no nos reímos de vuestros chistes racistas que violan nuestra integridad psíquica y física. Tampoco les creemos el cuento de que “mi mejor amigo es negro”, “yo no veo colores” o “son unos complejistas”.
“Hablar de racismo está de moda” porque denunciamos el genocidio de los pueblos negros, a manos de la hegemonía blanca.
Si para ti “Hablar de racismo está de moda”, lo que para mí significa ser consciente y dignamente antirracista, pues entonces, HABLAR DE RACISMO ESTÁ DE MODA.