Así se construye el imaginario racista del mundo: creando una narrativa donde las personas que no son blancas están por detrás del encuadre principal de la vida y son marginales.
Abraham Jiménez Enoa: No agradeceré que no me mates
¿Cómo demoré en darme cuenta de que en la televisión de mi país no salían negros cuando en las calles, en los ómnibus, en las filas, en las bodegas, estaban repletas de gente de mi color de piel?