(Tantas cosas hicimos hablamos y pensamos.)
Hasta La Ceiba (tuya y de nadie más ya para siempre) te va a llegar, con rabia y desconsuelo el llanto que no oculto, mientras, quiero saber: ¿Qué rumbo tomará lo que pensamos? Hasta ahora, damos bandazos y nos dan planazos. Así es la guerra... Tal vez, de ti dependa, desde ahora, que se inviertan los hechos. Tú puedes. Desde tu Ceiba, sopla como un viento mayor. Ven desde el mar, revuelto, azul como sus aguas. Ven como un viento astuto y sopla por donde no te esperan. Tú sabes. Desconfía, hazte el ausente, no te dejes morir. Por otro asunto me dijiste un día: "Con nosotros". Por este, el de tu ida, regresando quién sabe de qué modo y preguntando: "¿Hacia dónde, con quién?" Te respondiera: "¡Con nosotros!"
Enero 13/20
Foto: Sandra Abd´Allah-Álvarez Ramírez