(Tantas cosas hicimos hablamos y pensamos.)    
Hasta La Ceiba
(tuya y de nadie más ya para siempre)
te va a llegar,
con rabia y desconsuelo
el llanto que no oculto,
mientras, quiero saber:
¿Qué rumbo tomará lo que pensamos?  
Hasta ahora, 
damos bandazos y nos dan planazos.  
Así es la guerra...
Tal vez, de ti dependa, desde ahora, 
que se inviertan los hechos.  
Tú puedes.  
Desde tu Ceiba, sopla 
como un viento mayor.  
Ven desde el mar,
revuelto, azul como sus aguas.
Ven
como un viento astuto y sopla
por donde no te esperan.
Tú sabes. 
Desconfía,
hazte el ausente,
no te dejes morir. 
Por otro asunto me dijiste un día:
"Con nosotros".
Por este, el de tu ida, regresando
quién sabe de qué modo y preguntando:
"¿Hacia dónde, con quién?"
Te respondiera:
"¡Con nosotros!"                                      

Enero 13/20 

Foto: Sandra Abd´Allah-Álvarez Ramírez